Introducción

Una empresa de recubrimientos en polvo del Reino Unido se enfrentaba a continuas fallas en los rodamientos, inconsistencias en los productos y costos de mantenimiento en aumento. Buscaban una solución para garantizar un proceso de fabricación fluido y al mismo tiempo reducir los costos generales. 

El reto

La empresa de recubrimiento en polvo del Reino Unido se enfrentaba constantemente a un problema apremiante dentro de sus operaciones. El corazón de su sistema transportador manual, que entraba y salía de un horno de alta temperatura, estaba plagado de incesantes agarrotamientos de los rodamientos. Estas fallas en los rodamientos provocaron una cascada de problemas, incluida una calidad comprometida del producto, períodos de mantenimiento prolongados y gastos vertiginosos.

La solución

El equipo de Molyslip llevó a cabo una inspección exhaustiva de las instalaciones de los fabricantes. El equipo descubrió que los rodamientos en cuestión carecían de lubricación. Esta omisión requirió el reemplazo frecuente de 4 a 5 rodamientos cada mes, lo que supuso una carga financiera sustancial.

Dado el entorno de fabricación que implica la aplicación de pintura, la empresa enfrentó un obstáculo adicional. Los rodamientos debían funcionar sin problemas durante la pulverización de polvo, sin introducir ninguna inconsistencia en el producto. Los lubricantes convencionales que contienen compuestos de silicio no eran una opción, ya que podrían comprometer el proceso de recubrimiento.

Basándose en su amplia experiencia, Molyslip recomendó el uso de su grasa semifluida multiusos sin silicona: Aerosol de grasa líquida (LQG). LQG combina los beneficios de la grasa sólida y el aceite lubricante, diseñados perfectamente para aplicaciones de rodamientos. El aerosol actuó como un eficaz agente antiagarrotamiento, asegurando un funcionamiento perfecto de los rodamientos y al mismo tiempo cumpliendo con los requisitos de aplicación de pintura.

Además, LQG brinda protección contra la corrosión, evitando la formación de óxido incluso en ambientes hostiles. Esta protección de doble acción aumentó la longevidad de los rodamientos, aliviando aún más la carga de mantenimiento.

Los resultados

Con la implementación de LQG de Molyslip La empresa de recubrimiento en polvo experimentó una transformación notable. Los antes problemáticos agarrotamientos de los rodamientos se convirtieron en cosa del pasado, lo que condujo a una disminución del tiempo de inactividad, menores necesidades de mantenimiento y menos reemplazos. Los beneficios tangibles se tradujeron en ahorros de costes de más de £2.000.